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Feature News | Wednesday, July 23, 2025

Arquidiócesis de Miami: Organización Religiosa del Año 2025 por su labor en las prisiones

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MIAMI | Por su incansable labor pastoral en los centros de detención, el Departamento de Correcciones y Rehabilitación del Condado de Miami-Dade le otorgó a la Arquidiócesis de Miami el premio a la Organización Religiosa del Año 2025.

Este es un premio que reconoce décadas de servicio continuo y presencia espiritual de la Arquidiócesis de Miami en las cárceles del condado. El premio lo recibió el diácono Edgardo Farías, director del Ministerio Arquidiocesano de Prisiones.

La Arquidiócesis de Miami recibió el premio a la Organización Religiosa del Año 2025 por su incansable labor pastoral en los centros de detención del Condado de Miami-Dade. El premio otorgado por el Departamento de Correcciones y Rehabilitación del Condado de Miami-Dade (Miami-Dade Corrections and Rehabilitation Department) lo recibió el diácono Edgardo Farías, director del Ministerio Arquidiocesano de Prisiones.

Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC

La Arquidiócesis de Miami recibió el premio a la Organización Religiosa del Año 2025 por su incansable labor pastoral en los centros de detención del Condado de Miami-Dade. El premio otorgado por el Departamento de Correcciones y Rehabilitación del Condado de Miami-Dade (Miami-Dade Corrections and Rehabilitation Department) lo recibió el diácono Edgardo Farías, director del Ministerio Arquidiocesano de Prisiones.

Durante la presentación del premio en un desayuno con la participación de otras organizaciones locales, el 22 de abril de 2025, en el Doral, se dijo que, desde la fundación del Departamento de Correcciones, en la década de los años 70, la Arquidiócesis de Miami siempre ha trabajado de cerca en las cárceles con la pastoral a los encarcelados. Pero fue en los últimos 20 años, bajo el liderazgo del diácono Farías, que la pastoral carcelaria cobró una nueva dimensión.

“Mi tarea como director es abrir puertas, soy un embajador, soy representante, soy el rostro de la Arquidiócesis en todas estas jurisdicciones”, dijo el diácono Farías, quien coordina con los otros capellanes y todo el sistema carcelario para proveer servicios católicos en las cuatro cárceles del condado de Miami-Dade.

Al recibir el reconocimiento, el diácono Farías dijo sentirse “contento, feliz, sabiendo que la Arquidiócesis es reconocida por su labor dentro de los centros penitenciarios”.

El trabajo del Ministerio de Prisiones de la Arquidiócesis de Miami es brindar el cuidado pastoral católico, el servicio de la Palabra de Dios y la administración de la comunión, a alrededor de 18 mil personas privadas de la libertad, en los 30 centros de detención y prisiones, entre ellos prisiones federales, prisiones estatales y cárceles de condado, centros de atención juveniles y centros de inmigración, localizados en los condados de Broward, Miami-Dade y Monroe.

El diácono Farías es el cuarto director del Ministerio arquidiocesano de Prisiones. Para él, visitar las prisiones es “una vocación que mi esposa lo reafirma y apoya, y mi hija también”. Comenzó como voluntario en 1998 visitando a los presos un día a la semana, los viernes, con el ya fallecido Mons. Gilberto Fernández, Obispo Auxiliar de Miami en aquel tiempo. En el 2002 fue ordenado diácono permanente y en el 2006, director del Ministerio de Prisiones, sucediendo al anterior director, Sammy Díaz.

Continuó visitando prisiones y celebrando Misas con los obispos auxiliares de Miami Mons. Felipe Estévez, actual Obispo retirado de St. Augustine; John Noonan, actual Obispo de Orlando y ahora con el Obispo Enrique Delgado.

De esas visitas recuerda al Obispo Noonan, que en “una bolsita transparente de plástico llevaba una canastita de mimbre con los hostias y los pomitos de agua y el vino, todo, todo en madera, para que no haga ruido”, dijo el diácono Farías.

Después de casi 20 años como director del Ministerio de Prisiones, su tarea sigue siendo reclutar, entrenar y enviar. “Y el entrenamiento es lo básico para que la gente aprenda a seguir las reglas institucionales y, lo segundo, dar un buen servicio”, agregó.

El diacono Farías subraya que la población católica en las prisiones es del 10 al 15%. “Es poco, pero nuestra tarea es alcanzarlos”, colaborando con los capellanes de las demás denominaciones cristianas.

Al mismo tiempo, no hay suficientes sacerdotes para celebrar la Misa, por lo que el diácono está formando laicos para que den el servicio de la Palabra y administren la comunión en ausencia de un sacerdote.

El diácono Edgardo Farías, director del Ministerio Arquidiocesano de Prisiones, en su oficina del Centro Pastoral, con el premio otorgado a la Arquidiócesis como la Organización Religiosa del Año 2025.

Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC

El diácono Edgardo Farías, director del Ministerio Arquidiocesano de Prisiones, en su oficina del Centro Pastoral, con el premio otorgado a la Arquidiócesis como la Organización Religiosa del Año 2025.

“Una vez el Obispo Estévez me dijo: ‘Edgardo, si no consigues sacerdotes, hazlo con diáconos. Y si no consigues diáconos, hazlo con los laicos’”, dijo el diácono Farías.

La cantidad de voluntarios disminuyó durante la pandemia de COVID, pero ahora está creciendo nuevamente. Hay alrededor de 300 voluntarios y se realizan retiros espirituales en las prisiones federales y estatales. Hay grupos carismáticos, cursillistas y de Emaús.

“En una prisión de mujeres hay cinco retiros al año, con sacerdotes, con confesiones y exposición del Santísimo”, agregó el diácono.

El Ministerio de Prisiones también brinda acompañamiento a las familias, los orientan cuando un familiar va a cumplir una sentencia en una prisión federal y los acompañan durante el proceso. “Les decimos: ‘no te preocupes que hay voluntarios católicos. Vamos a estar acompañándote. Yo mismo voy a ir a visitarte’”.

Pero se necesitan más voluntarios, más sacerdotes y más diáconos, indica el diácono Farías.

Trabajar con los encarcelados “es un llamado. Y Dios te equipa, te provee, te entrena para responder a este llamado”.

Aunque es la primera vez que la Arquidiócesis recibe este premio, el diácono Farías ha recibido otros. En 2015, recibió el National Day of Prayer Appreciation Award, del Sheriff del Condado de Broward, por su dedicación y liderazgo comunitario.

En enero de 2025, el grupo Hermanos de la Calle, una organización sin fines de lucro en Miami que ayuda a personas sin hogar, como reconocimiento “Por enseñarnos a ver a Cristo en los privados de libertad y ser ejemplo para todos nosotros”, le  entregó al diácono Farías una escultura de Timothy P. Schmalz, que simboliza el trabajo con migrantes y marginados. Schmalz también realizó la escultura Angels Unawares (“Ángeles sin saberlo”), que se instaló en la plaza de San Pedro, en el Vaticano, en 2019, y que simboliza la hospitalidad que se les debe a todos los seres humanos, incluso a los desconocidos.

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