
La Economía de Francesco, tanto del santo como del papa
Monday, January 25, 2021
*Tony Magliano
El mundo necesita una economía nacional y global que funcione de manera justa y equitativa para todos, especialmente para los pobres.
Los hambrientos, los desamparados, los desempleados, los subempleados, los refugiados y todos los indigentes necesitan con urgencia y merecen una distribución justa y equitativa de la riqueza. En cambio, la mayoría de las economías está diseñada para beneficiar de manera abrumadora a los ricos, mientras que arrojan migajas a los necesitados y al mismo tiempo causan estragos en la tierra.
Por ejemplo, mientras las empresas de petróleo, gas y carbón —que contribuyen peligrosamente al cambio climático— continúan recibiendo miles de millones de dólares de los contribuyentes del gobierno de los Estados Unidos y otras naciones ricas en subsidios anuales (https://bit.ly/397xho3), y mientras se mantienen los enormes recortes fiscales de los Estados Unidos que han beneficiado abrumadoramente a los individuos ricos y a las grandes empresas, el salario mínimo federal de $7.25 no se ha aumentado en más de 10 años.
Y esto fue antes del COVID. Ahora millones de personas no sólo están desempleadas, sino también sin seguro. Además, el Banco Mundial advirtió que el número de personas en situación de extrema pobreza —definida como aquellas que luchan por sobrevivir con menos de $1.90 al día— aumentaría por lo menos en 88 millones antes de finalizar 2020 (http://bit.ly/3qcmTAY). Y en medio de esta crisis, los multimillonarios siguen acumulando nuevas fortunas (https://bit.ly/3fs9lgx), mientras que un sinnúmero de trabajadores continúa como meros engranajes desechables en la rueda de las empresas, incluso durante la pandemia (http://bit.ly/TysonApuestasCovid).
En toda esta injusticia nacional y global interviene el Papa Francisco. Dios sabe que nuestro Santo Padre ha estado haciendo todo lo que puede para inspirar al mundo a deshacer el statu quo económico inmoral e injusto, y crear sistemas económicos que funcionen para todos, especialmente para los pobres.
Su esfuerzo más reciente es la iniciativa muy creativa llamada "Economía de Francesco".
En una carta maravillosamente profética dirigida a los jóvenes economistas y empresarios de todo el mundo, el Papa Francisco extendió una invitación para participar en una reunión internacional destinada a sentar las bases de un "pacto para cambiar la economía actual y darle un alma a la economía del mañana" (https://bit.ly/33eBlzn).
¡Y acudieron!
Del 19 a 21 de noviembre de 2020, más de 2,000 jóvenes economistas y empresarios de 120 países, junto con expertos de gran visión, dieron inicio a la "Economía de Francesco" con una conferencia mundial en línea centrada en la histórica Basílica de San Francisco de Asís, Italia (https://francescoeconomy.ceu.es/).
La difusión del vídeo de la conferencia "La Economía de Francesco" (http://bit.ly/EconomiaDeFrancesco) sería una forma inspiradora de imaginar y comenzar a poner en práctica un mundo que funcione para todos. Consideren utilizarlo en la parroquia, la escuela secundaria, la universidad, la pastoral universitaria y en diversos encuentros de grupos de fe.
En su declaración final, los jóvenes profesionales participantes en la conferencia "Economía de Francesco" presentan a las potencias mundiales y a las instituciones financieras una propuesta de 12 puntos centrada en el ser humano, en la que se esboza un nuevo enfoque económico para alejarse de la codicia y la muerte, y avanzar hacia la vida y la dignidad para todos (https://bit.ly/362fQDF).
Concluyen con este conmovedor punto final: "Nosotros, los jóvenes, no podemos seguir tolerando que se retiren recursos de las escuelas, de la atención de la salud, de nuestro presente y de nuestro futuro para construir armas y alimentar las guerras que se necesitan para venderlas. Nos gustaría decirles a nuestros niños que el mundo en guerra se ha terminado para siempre".
¡Que el pueblo de Dios responda "Amén"!
Al concluir su carta de invitación, el Papa Francisco escribió: "El nombre de este evento —'Economía de Francesco'— se refiere claramente al Santo de Asís y al Evangelio que vivió. ... Para mí, que tomé su nombre, es una fuente constante de inspiración".
Que San Francisco y el Papa Francisco sean una fuente constante de inspiración para cada uno de nosotros de manera que, con la gracia de Dios, podamos juntos construir un mundo donde todo el pueblo de Dios tenga un lugar en la mesa de la abundancia.
Comments from readers